lunes, 10 de agosto de 2009

LA NECESIDAD DE UN "BLINDAJE SOCIAL" EN TIEMPOS DE CRISIS. EL CASO DE MERCOSUR

La crisis económica que surge hace justo un año amenaza con repercutir de forma negativa sobre los derechos de los trabajadores. En Europa - y de esto hablaremos más adelante en otro momento - parece haber una ofensiva sobre (y contra) las garantías de la estabilidad en el empleo a la vez que un intento por reducir al mínimo las capacidades de la acción colectiva. La reivindicación de la Confederación Europea de Sindicatos sobre la necesidad de incorporar a los tratados fundacionales de la Unión Europea una "claúsula social", se corresponde con otras iniciativas, como la que aquí se incorpora, de la Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur, que reivindican un "blindaje social" frente a la crisis en el marco del MERCOSUR. El comunicado que estos sindicatos firman en Asunción a finales de julio de 2009 es interesante - y por ello no ha sido recogido en ningún medio de información - y de él se da cuenta a continuación.

El MERCOSUR está afectado por la crisis económica y financiera mundial. Esta crisis profundiza la incertidumbre por la que ya venía atravesando, como resultado de un prolongado proceso de dilación de una verdadera integración institucional, económica, productiva, cultural, social y política, tal como estaba establecido en su instancia fundacional del tratado de Asunción. Situación que amenaza con un retroceso en los ya de por sí escasos avances de articulación comercial, productiva y social. El MERCOSUR que inició sus actividades como un proyecto exclusivamente económico -comercial, gracias a la presión de la sociedad, liderada por las Centrales Sindicales de la subregión, creó espacios de tratamiento de los temas laborales y del empleo y creó una Dimensión Social que por su propia naturaleza fue conquistando, para la ciudadanía, un horizonte de integración que promueve el desarrollo de nuestras naciones. Hoy, frente a la crisis, mas que nunca el Mercosur necesita profundizar el proceso de integración, pues la única forma de disminuir su impacto sobre nuestros países es a través de la consolidación del bloque. En primer lugar es exigencia que los gobiernos del Mercosur profundicen el debate sobre el tema entre si y con la amplia participación de las representaciones sociales y políticas que ayudan a la marcha de la integración. El desafío aquí presente es sincerar el debate sobre la crisis del Mercosur. Es fundamental dar un paso decisivo hacia una verdadera institucionalización, el
establecimiento de una estrategia comercial, productiva, económica y social que tenga como prioridad la promoción del desarrollo sustentable y las prioridades de nuestros pueblos. Necesitamos que las decisiones sean adoptadas en consenso con la participación de todos los países, que promuevan el compromiso no sólo de los Estados sino también de los empresarios y de los trabajadores. En este sentido el compromiso Sindical con la llamada Dimensión Social del MERCOSUR, ha y sigue siendo una responsabilidad que entendemos es compartida por los Gobiernos. En particular en esta etapa de la Integración donde enfrentamos una crisis económica y financiera que impacta directamente sobre el empleo y el trabajo, la Dimensión Social debe rápidamente implementar un “Blindaje Social” que proteja el trabajo y los derechos de trabajadores y trabajadoras del MERCOSUR.


Para ello, la CCSCS viene demandando que se acelere el proceso de reforma institucional del MERCOSUR, brindándole mayor transparencia, eficacia y participación de la sociedad en el proceso de integración. Es imprescindible apresurar el proceso de coordinación macroeconómica, que permita crear e impulsar políticas regionales ante los ciclos depresivos de la economía mundial, tal como el que hoy afrontamos. Resulta imperioso profundizar las políticas regionales orientadas a la reducción de las
asimetrías.

La prioridad para el empleo decente

En junio pasado, en Ginebra, el Pacto Mundial del Empleo, la OIT lanzo en su Conferencia anual y en la reunión del ECOSOC-ONU. El documento relaciona una serie de medidas concretas y es un llamado a todos los gobiernos y sociedades, especialmente organizaciones empresariales y sindicales, a sumar esfuerzo para generar empleo de calidad, con protección laboral y social, como forma de disminuir los impactos de la crisis económica y financiera. Los Ministros del Trabajo del Mercosur firmaron el Pacto y tornaron público un documento anunciando su compromiso con la implementación del mismo en nuestro bloque. De inmediato declaramos que nos sumamos a ese compromiso y esfuerzo. Pero para que el se cumpla es necesario que el tema gane lugar de expresión en la agenda del Mercosur y se refuercen los organismos sociolaborales y el Observatorio del Mercado de Trabajo,garantizando al mismo espacio político e recursos necesarios. Hay que armar un plan de trabajo ya y tener en cuenta principalmente que esa crisis afecta el empleo y el salario de todos, pero principalmente de la juventud y de las mujeres. Por lo tanto hay que implementar un conjunto de medidas teniendo en cuenta la necesidad promover la igualdad de oportunidad y de salarios para hombres y mujeres. El movimiento sindical del cono sur, entre otros sectores, está comprometido con el proceso de integración, convencidos que el único mecanismo de desarrollo sustentable de nuestra región es mediante la unión de nuestros pueblos y la coordinación de políticas entre los Estados miembros. Para nuestros países, la integración no es una opción, es una imperiosa necesidad. Entendemos que es momento de decisiones para avanzar hacia una integración real, que se internalice en nuestra ciudadanía regional. De hecho nuestras expectativas están centradas, como lo estuvieron desde el inicio del proceso de Integración, en participar activamente en las iniciativas, el debate, la elaboración y las decisiones en los Órganos del MERCOSUR.

Defender y fortalecer la Democracia

Para finalizar queremos decir que acompañamos integralmente la posición de firmeza contra el golpe que sacó del gobierno un presidente institucionalmente electo en Honduras. Estamos seguros que nuestros gobiernos mantendrán esa postura y proponemos que aumente el grado de presión sobre los organismos multilaterales para que se recupere la legalidad democrática en Honduras.

Asunción, 24 de julio de 2009

Coordinadora de Centrales Sindicales del Cono Sur


CGT y CTA Argentina, CUT, Força Sindical, UGT, CTB y CGTB de Brasil, CUT de Chile, CUT y CUT A de Paraguay, PIT-CNT de Uruguay

2 comentarios:

Montxo Sáez González dijo...

Urge resolver este atentado a la libertad y a la democracia. ¿Hasta cuando la inacción de Europa en este tema? ¡viva Hinduras democrática!

Montxo Sáez González dijo...

Quiero decir Honduras