Es una buena noticia. En una época en la que los periódicos
y medios de comunicación “externos” al pensamiento dominante desaparecen
dejando un rastro de periodistas y trabajadores expulsados de la capacidad de
generar la información – entre nosotros la vicisitud complicada de “Público” es
bien conocida, con sus ramificaciones , Il Manifesto ha sabido defenderse
activamente y al final ha conseguido sobrevivir. Eso sí diezmado. 36
trabajadores se quedan, 34 van a la Cassa
Integrazione y se incorporan de forma rotatoria.
El acuerdo ha permitido
una acción conjunta del ministerio de trabajo y del de desarrollo económico,
los administradores del concurso, los sindicatos y la solidaridad activa de
tantos colaboradores que han continuado escribiendo sin remuneración. Pero han
sido ante todo los círculos de apoyo, la acción de los ciudadanos y
simpatizantes de Il Manifesto quienes han conseguido realmente mantener el
diario. Son esos lectores, simpatizantes y sostenedores, quienes han podido al
final dar un sentido a la permanencia del periódico, dar vida presente a la
cabecera histórica. Y lo han hecho en medio de un ataque sin precedentes a las
posiciones de la izquierda amparado en los efectos terribles de la Crisis.
“Imaginar una izquierda unitaria pero plural, popular pero alternativa exige un trabajo
doble. Antes de construir hay que desescombrar el suelo de las ruinas y
cascotes y qui´za comprender que hay pocas cosas que reciclar. El gobierno Monti ayuda a este propósito. Sus
recetas sobre pensiones y trabajo son un parteaguas, una línea divisoria que
permite redefinir el campo de la izquierda. La cual en Italia ha perdido
incluso la voz y la palabra. Un diario como Il Manifesto es un instrumento
cultural privilegiado para cultivar la ambición de un renacimiento político”.
Excelente publicación todo un gusto visitarte.
ResponderEliminarGracias por Compartir, Buen Blog.
ResponderEliminarSaludos..