Es bien
conocida la presencia muy señalada en las redes de blogs laboralistas que
mantienen una interlocución muy frecuente – en algunos casos prácticamente a
diario – con una amplia legión de seguidores y comentaristas. Los blogs de Eduardo Rojo e Ignasi
Beltrán, son, cada uno en su estilo, referencias ya insoslayables para un abigarrado conjunto de abogados y docentes, asesores sindicales y personal
judicial, y en general para todos y todas quienes estén interesadas en conocer
el devenir actualizado de la regulación de nuestras relaciones laborales, tanto
en el plano normativo como judicial, la incidencia en este cuadro normativo e
interpretativo de la acción de los tribunales europeos y, especialmente en el
caso del profesor Rojo Torrecilla,
importantes pinceladas sobre derecho comparado.
Es interesante resaltar que ambos
son profesores de universidad y que seguramente la proyección de su trabajo de
investigación y de docencia ha sido centuplicada mediante el uso de esta
herramienta de comunicación. Lo que a su vez entiendo que ha repercutido
también en la forma de conocer el derecho del trabajo a través de su propia
visión o forma de comunicarlo e informar sobre él a la legión de followers que lo consultan. Es esta una
forma de interpelar al público especializado que también emprendió, antes de su
jubilación, Mikel Urrutikoetxea y
que ha tenido recientemente importantes seguidores, en el blog de Olga Fotinopoulou y Jaime Segalés.
Esa característica, la de ser
profesor universitario, ha sido asimismo compartida por otros blogs en los que
la temática laboral y jurídica se concentra en la divulgación de las propias
publicaciones académicas o de los encuentros y jornadas de debate que se
considera de interés, como sucede con el blog de Wilfredo Sanguineti, o se acompaña también de reflexiones sobre el
panorama político o sobre reflexiones más cercanas a la cultura del debate
sindical, como en los blogs de Jesús
Cruz, Joaquín Aparicio, Jaime Cabeza o en el de quien esto escribe. Las paginas que abren
entes institucionales como Facultades o Departamentos en Facebook reduplican
asimismo este presencia en las redes de las actividades universitarias, pero
también se abren a compartir las entradas que los blog laboralistas efectúan
sobre asuntos de su interés o que le son cercanos.
Por eso la llegada a la red de
nuevas bitácoras en el espacio del derecho del trabajo es siempre un motivo de
alegría. Más aún si se trata de un blog de una docente universitaria que además
es colega y amiga en el Departamento de Derecho del trabajo y Trabajo Social de
la Universidad de Castilla La Mancha. Se trata de Gratiela Moraru, cuyo blog lleva sencillamente su nombre y ha
aparecido precisamente en el contexto de la movilización feminista del 8 de
marzo. Esta es la dirección: http://www.gratielamoraru.es/
De hecho, el sesgo con el que
hasta el momento nos ha conectado este nuevo blog es precisamente el de la
igualdad por motivos de género. En la primera entrada, glosando el premio 8 de
marzo sobre igualdad de las mujeres que convocaba la Asociación Española de
Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social (AEDTSS) y que se dedicaba a la
temática de la promoción social y profesional de las mujeres, y que obtuvo la
profesora Moraru con una
contribución sobre las proyecciones
convencionales de la igualdad en la clasificación y promoción profesional, que
le fue entregado en la jornada que organizaba la ADETSS en el Consejo Económico
y Social de España el 7 de marzo pasado. En la segunda, comentando las
manifestaciones de “un 8 de marzo memorable”, como la ha titulado, entendiendo
que “la solidaridad de las mujeres que se han concentrado en las calles de
distintas ciudades de España evidencia la persistencia de la desigualdad social
en este colectivo y la concentración de sus fuerzas y solidaridad para la
obtención de un interés común: la igualdad”, y que “los políticos que niegan la
existencia de la discriminación están fomentando la consecución de una sociedad
desigual”. La reivindicación del 8 de marzo como señal de “la urgencia de un
cambio de civilización y de la resignificación del concepto de trabajo”, donde
la calle se tiñó de violeta, “el color de la conciencia de la libertad y de la
dignidad”.
Un comienzo prometedor por tanto,
que seguiremos con interés, situándole entre la lista de blogs amigos y al que
sin duda haremos referencia desde esta página. Desde donde felicitamos a su
autora y le deseamos larga vida en la blogosfera laboralista a la que desde ya
le damos la bienvenida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario