El
23 de abril, como ha recogido la mayoría de la prensa española, se produjo una
marcha federal en las principales ciudades de Argentina contra los recortes
presupuestarios de la Universidad y las tentativas de privatización de la misma
por el gobierno del presidente Milei, que aplicó su violenta imagen
de la motosierra a las dotaciones estatales a las universidades sobre la base
de su ideario de congelar el gasto público y hacer desaparecer la presencia del
Estado salvo en los aparatos represivos y en la subvención millonaria a las
instituciones financieras. Además de esta ofensiva claramente neoliberal, el
presidente que habla con sus perros muertos aprovechó este tema para desplegar
su guerra cultural contra la universidad pública, balbuceando de que en esas
sedes se producía el adoctrinamiento ideológico por los sectores de la
izquierda – los “zurdos” – y el despilfarro de recursos. Un discurso que por
cierto nosotros en España conocemos muy bien de la mano de las opiniones que
expresa el líder de la ultraderecha Vox que entiende que las universidades más
prestigiosas de Europa son "máquina de censura, de coacción, de
adoctrinamiento y de antisemitismo” (26 de febrero de 2024)
La reacción
popular ha sido impresionante. A la convocatoria ha respondido una enorme
multitud de personas que se identificaban con uno de los logros democráticos
más importantes de la Argentina, su universidad pública y gratuita, hoy dejada
caer y sin recursos, devorada la partida presupuestaria por la inflación
galopante que continua y se acelera desde la llegada al poder de Milei. Se trató de una
manifestación transversal, con la asistencia de prácticamente todos los
estudiantes y los profesores, pero también secundada por fuerzas políticas que
van desde los liberales y radicales al peronismo, los sindicatos y asociaciones
de la sociedad civil. Las fotos de la manifestación en Buenos Aires son
impresionantes, pero el movimiento se reiteró en las principales ciudades del
país con universidad, siendo también especialmente relevantes las marchas en
Córdoba y en Rosario.
Un centro
importante de organización de la resistencia se localizó en la Facultad de
Derecho de la Universidad de Buenos Aires, donde tres de los catedráticos de
Derecho del Trabajo de esta Universidad firmaron un manifiesto explicando las
razones de la Marcha de protesta, y crearon un espacio de Radio Abierta en las
cuatro horas anteriores a la Marcha, que se emitió desde la planta principal de
la Facultad, frente al aula magna, y en streaming a través del canal de youtube
del Sindicato de Prensa de Buenos Aires, SIPREBA. En ella se conectó con
ilustres exponentes del país y extranjeros, entre ellos Joaquin
Aparicio de la Universidad de Castilla La Mancha, que insistió en el espacio
plural de la universidad pública frente al espacio de mercado que representan
las universidades privadas, construidas en torno a sus idearios uniformadores y
excluyentes.
La oposición
activa de nuestros compañeros de la UBA tiene un significado especial.
Demuestra la ligazón directa entre un trabajo universitario comprometido con la
realidad social en clave decididamente alternativa, la idea de una Universidad
pública en la que el pluralismo ideológico permita el debate sobre el
pensamiento sobre el derecho y no simplemente sobre la forma de aplicarlo, y la
propia configuración de la situación universitaria como un espacio de
compromiso y de defensa de la democracia.
No puede
permitirse la destrucción de la cultura del estudio y de la formación como eje
de una educación superior laica, republicana y abierta a toda la ciudadanía a
través de la gratuidad en el acceso, una conquista fundamental del sistema
democrático argentino. La lucha contra el autoritarismo iliberal que asola hoy
el espacio público de aquella nación es fundamental para preservar un elemento
básico en la configuración de un consenso social y político ciudadano. Los tres
catedráticos de Derecho del Trabajo de la UBA – buenos amigos desde hace mucho
tiempo en las dos orillas del océano – han comprendido este momento y lo han
impulsado con enorme responsabilidad. Y todos nosotros, desde España, les
manifestamos nuestra solidaridad y nuestro apoyo mediante esta entrada en el
blog.
Este es el
manifiesto que han distribuido y que ha protagonizado la marcha de los
estudiantes y profesores de la Facultad de Derecho de la UBA:
POR QUÉ MARCHAMOS
Marchamos
porque el Gobierno Nacional no garantiza el presupuesto de las Universidades
Nacionales, y porque ese presupuesto debe, al menos, ser consistente con las
transferencias del año precedente más su ajuste por inflación. A la fecha, la
prórroga del vigente en el año anterior implica una reducción del setenta y dos
por ciento en términos reales, lo que determina el presupuesto universitario
más bajo desde que se tenga registro (Informe ACIJ, abril 2024).
Pero,
además, marchamos porque la Universidad pública, gratuita, plural y de calidad
es una conquista de nuestra sociedad y parte del compromiso de generaciones,
consistente con una comunidad inclusiva, igualitaria y democrática.
Esa,
nuestra Universidad, es parte de la construcción de un país libre y soberano,
formando científicos, profesionales y académicos, solidarios y determinados a
la progresiva mejora de las condiciones de vida de la población, al desarrollo
económico y a la justa distribución de sus beneficios.
En
sus aulas se enseña, debate, investiga, en un marco de libertad consistente con
su autarquía, libertad de cátedra, concursos docentes públicos y abiertos,
participación de los distintos claustros en su gobierno. Sólo las dictaduras
han intentado acallarla. Una y otra vez se ha defendido, ha resistido y lo seguirá haciendo.
Atacar
a nuestra Universidad es dañar las señas de identidad de nuestra idea de
Nación, es negar los hitos que la conformaron, la Reforma del ´18, sus
transformaciones al hilo de las luchas sociales y políticas que abrieron cauces
de dignidad y participación.
Atacar
a nuestra Universidad es negar la naturaleza democrática de nuestro pueblo, que
asegura de modo igualitario el acceso a los Derechos Fundamentales, por la sola
existencia independientemente del poder económico.
Atacar
ésta, nuestra Universidad, es ponerse al margen de la legalidad constitucional,
la que garantiza la educación como responsabilidad indelegable del Estado,
la participación de la familia y la sociedad, la promoción de los valores
democráticos y la igualdad de oportunidades y posibilidades sin discriminación
alguna, los principios de gratuidad y equidad de la educación pública estatal y
la autonomía y autarquía de las universidades nacionales, en todos los
casos y para todos los efectos concordes con el principio normativo de la
Justicia Social (art. 75.19 C.N.).
Por
todo ello:
1)
Exigimos el inmediato cumplimiento de las
transferencias presupuestarias a favor de las Universidades Nacionales por
parte del Gobierno Nacional;
2)
Rechazamos todas aquellas expresiones que lesionan
su autonomía y desprecian el valor de la Universidad pública como factor
democrático e igualitario;
3)
Convocamos a la Marcha Federal en Defensa de la
Universidad Pública, del día 23 de abril.
Declaración
de docentes de las Cátedras de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social de la
Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, en el marco de la Radio
Abierta que tiene lugar el día 23 de abril, entre las 10 y las 14 hs., en la
Facultad de Derecho.
Guillermo Gianibelli. Héctor O. García. Pablo Topet.