martes, 25 de junio de 2013

SISTEMAS NACIONALES DE REPRESENTACIÓN SINDICAL EN LA UNIÓN EUROPEA




La editorial Bomarzo ha realizado una experiencia singular al publicar simultáneamente dos libros, en inglés y en italiano, sobre los distintos sistemas de rerpesentación sindical en Europa, producto de un proyecto de investigación europeo. Ambos libros no están en el catálogo de la editorial porque han sido distribuidos plenamente por los responsables del proyecto, lo que no impide que sea conocido por los lectores interesados, a quienes se dedica la siguiente reseña.



Resultado de un proyecto de investigación presentado por el Gabinete Jurídico – Uffizio Legislativo – de la CGIL italiana aprobado por la Comisión Europea, coordinado académicamente por Carmen La Macchia, profesora de Derecho del Trabajo en la Universidad de Messina, el libro reúne una serie de estudios nacionales sobre el marco jurídico de la representación colectiva en una secuencia de países. Se publica en una doble versión, en inglés y en italiano, como libros independientes y por tanto con ISBN diferentes, y resulta llamativo por demostrar la porosidad de las fronteras europeas, que sea la editorial Bomarzo la encargada de publicar ambos ejemplares.

El proyecto europeo, presentado por la CGIL italiana, como se ha dicho, pretendía mostrar el mosaico de la representación en los países europeos tanto “tradicionales” , es decir los socios fundadores de la Unión Europea, como de las nuevas democracias mediterráneas, y, en último término, de los países que acceden con el nuevo siglo a la UE provenientes del Este post-comunista. Junto a un grupo de expertos, el comité asesor científico, que desarrollarían el trabajo propiamente explicativo del marco normativo respectivo, el proyecto preveía la existencia de partners sindicales que interactuaban con los expertos y permitían por tanto una mayor precisión de la información normativa y jurisprudencial. Además de la CES, estaban presentes la FGTB belga, el TUC británico y la LO sueca, junto a CCOO de España y SEK de Chipre, PODREPKA, de Bulgaria y Cartel ALFA de Rumania. La presentación de Stefano Oriani, manager del proyecto y responsable del gabinete jurídico de la CGIL da cuenta tanto de las dificultades organizativas de este proyecto como de los avances en la comprensión mutua de las distintas realidades nacionales y de la elaboración de una suerte de esquema interpretativo de validez generalizada del fenómeno más allá de la consabida reclusión en la peculiariedad nacional y en la exaltación de la diferencia del régimen representativo propio como un destino acabado que no admite discusión sino tan sólo exégesis histórica y política. El aval confederal lo otorga Fabrizio Solari en un prefacio en el que se muestra razonablemente preocupado ante la quiebra de las reglas de la representación colectiva en Italia ante las vicisitudes del caso Fiat.

El resultado de un año de trabajo en torno a este proyecto ha dado como resultado los dos libros reseñados, que acogen la síntesis de los respectivos informes nacionales sobre las reglas de representación sindical en los diferentes ámbitos del sindicalismo europeo. Nórdico e insular, con Suecia (realizado por Laura Carlson) y Reino Unido (por Daniel Blackburn y Keith Ewing), continental clásico, en donde se sitúan los informes de Bélgica (Philip Dorssemont), Francia (Pascal Lokiec), Alemania (Eva Kocher) e Italia (Giuseppe Ferraro), junto con los de España (Antonio Baylos y Nunzia Castelli) y Chipre (Constantinos Kombos), y la situación de Polonia (Andrzej Swiatkowski), Bulgaria (Plamenka Markova) y Rumania (Alexandru y Tiberiu Ticlea). La coordinadora del libro, Carmen La Macchia, realiza un sugerente examen comparado de los diferentes sistemas de representación de los intereses de los trabajadores en la que plantea los elementos centrales que permiten configurar un mapa de problemas de la representación y de la representatividad que inciden directamente en la capacidad de acción colectiva y en su alcance. Los modelos sindicales de los once países estudiados permiten así obtener una fotografía de la regulación de la representación sindical en los diferentes ordenamientos jurídicos de referencia – le droit saisi par la photographie – tanto en lo que respecta al itinerario histórico de su conformación institucional, como al perfil organizativo y, lo que es más requerido, a las funciones que desarrolla la noción de representación y su consecuencia jurídico-política, la representatividad. Y ello tanto respecto a la negociación colectiva como, más en concreto, a las formas de “medir” la representación, y sus repercusiones sobre la aplicación generalizada de los acuerdos colectivos, la tutela de los derechos colectivos no ligados a la negociación, incluso una referencia al tema, que requeriría un examen específico, de la representación en los lugares de trabajo. 

Para quienes quieran por tanto aprovechar un análisis comparado bien efectuado, encauzado sobre un esquema común en torno a problemas habituales derivados del principio representativo que origina la dimensión colectiva del trabajo, este (doble) libro es muy recomendable. Sólo se echa a faltar que la Comisión Europea, que seleccionó y aprobó el proyecto de investigación en el ámbito de los proyectos sobre “Diálogo social y relaciones industriales”, no haya previsto asimismo su traducción al español. Otra vez será.


REPRESENTING EMPLOYEE INTERESTS: TRADE UNION SYSTEM WITHIN THE EU. /
SISTEMI NAZIONALI DI RAPPRESENTANZA SINDACALE

Carmen La Macchia (Ed.), Editorial Bomarzo, Albacete, 2013, 313 y 319 pp. respectivamente.

1 comentario:

Julian dijo...

¿Hay alguna manera de poder conseguir el libro en cualquier tipo de formato?
Gracias